Dos químicos de la Universidad de Linnaeus en Suecia crearon un modelo por computadora donde analizaron cómo interactua el agua, el etanol y el guaiacol (compuesto orgánico que proviene de los barriles de roble donde es añejado el whisky).

El modelo les permitió descubrir que cuando el licor tiene un porcentaje de alcohol igual o superior al 40%, las moléculas del compuesto tienden a quedarse dentro del cuerpo del líquido. Cuando el porcentaje disminuye hasta un 25%, las moléculas se van a la superficie del líquido y con ellas se llevan el aroma y sabor del whisky.

Es por ello que diluir el alcohol aumenta la densidad del guaiacol en la superficie.

Al final la sugerencia es diluirlo al gusto personal para que disfrutes del whisky… o como hace la mayoría: le agregan hielo para enfriarlo y entonces estás agregando agua. 😉

*con información de la BBC