En días pasados asistí a una cata privada que organizó Viparmex en el restaurante Ofelia Bistro, para presentar a restauranteros y medios los vinos argentinos de la Bodega Alta Vista.
Rocío Campoy, encargada de promover los vinos en Latinoamérica y Canadá nos contó sobre la bodega, sobre las fincas en Mendoza, Argentina, que es de donde provienen, características especiales de los vinos y también me concedió una entrevista.
Alta Vista busca fomentar la diversidad de los varietales que cultiva, para que la oferta no quede acotada, y para que no nos quedemos con la idea que Argentina = Malbec. Producen 3 millones de botellas al año, con 140 hectáreas propias. Pero en este año tienen el reto de que los viñedos sufrieron los estragos del clima, a lo cual la marca prefiere sacrificar el número de botellas en producción que la calidad de sus vinos.
La ideología de la bodega es siempre asegurar la calidad y que ésta se repita año tras año, dando la confianza a sus consumidores de que los viñedos son propios y están arriba de los 1000 msnm.
Los vinos que degustamos fueron el Alta Vista Rosé Malbec 2016, que yo acompañé con un raviol de pato.
Enseguida llegaron 2 malbecs: Alta Vista Classic Argentina Malbec 2015 y el Alta Vista Premium State Malbec 2015; ambos buenísimos, maridados con esquites con pato y embutidos. El primero un vino fácil de tomar y muy disfrutable, el Premium un excelente vino para quedar bien en una comida o cena!
Luego degustamos el que más me gustó: Alta Vista Premium Estate Cabernet Franc 2014. Increíble!
Otra propuesta interesante fue el Alta Vista Atemporal 2013, elaborado con Malbec, Cabernet Sauvignon y Petit Verdot
Por último, el postre fue un rico Membrillo con queso semicurado de oveja, con el burbujeante y refrescante Alta Vista Premium Extra Brut.
Todos estos vinos los puedes comprar en Viparmex, así como otras etiquetas de la bodega, por ejemplo: su vino estrella el Alta Vista Alto, los interesantes Single Vineyards o el Terroir Selection.
El día de la entrevista se celebraba el Día Mundial del Medio Ambiente, y entonces le pregunté a Rocío cuáles eran las medidas ecológicas de la bodega y así me contó que todas las salas de barricas están subterráneas, entonces no se necesita bombear, lo cual se traduce en un ahorro de energía. También practican la separación de residuos y cuentan con todas las normas de ISO.
Por último, platicamos sobre cómo maridar los vinos de la bodega con la cocina mexicana, y por ejemplo, un tinto va bien con unos tacos de carne (siempre sin exceso de picante), o un Torrontés con un platillo de carne con chile. Claro que el rosado o los blancos irían muy bien con nuestros platillos de mar.