Aquí unos sencillos tips para que te alimentes bien hasta en la oficina:
1. Lleva tu propio lonche a la oficina: así sabrás exactamente qué estás comiendo y puedes hacerlo con ingredientes de buena calidad, evitando alimentos procesados o altos en grasas y azúcares.
2. Siempre haz un tiempo, a media mañana, para hacer un pequeño snack de frutas, verduras o tal vez un yogur. Te dará la energía suficiente para trabajar hasta la hora de la comida.
3. Desayuna en casa un smoothie o un licuado alto en fibra. Un rico jugo verde es una buena idea, aparte que así tendrás muchos nutrientes para comenzar el día.
4. Evita comer junto a la computadora… necesitas un tiempo para relajare y disfrutar de tu comida.
5. En la medida de lo posible, levántate de tu escritorio 1 vez por cada hora de trabajo; da una vuelta, estira las piernas…