Bueno, no sólo este dilema lo tiene el restaurante Nobu, si no todos aquellos que se atreven a vender animales en peligro de extinción.

El caso específico es que en el restaurante Nobu está pensando declarar en sus menús que el atún que se sirve en sus platillos (atún aleta azul) está considerando en peligro de extinción…

Todo esto para crear conciencia en los comensales de qué es exactamente lo que están comiendo…

Creo que se debería hacer y más aún, si es un animal que de tanto ser cazado, su población está mermando…  y precisamente es cazado para ser servido en las mesas de los restaurantes más caros alrededor del mundo.

¿Ustedes pedirían un platillo, en el cual se contenga un animal en peligro de extinción?